Magic Mike.

¡¡Hola!!

¿Qué tal? Espero que todo siga bien J

Pues nos movemos una vez más hacia el mundo del cine, esta vez de la mano de Magic Mike, que fue estrenada hace unas semanas. Aish… la versión masculina del conocido Bar Coyote.

A ver, cuando me puse a verla ya sabía qué me podría encontrar, ya suponía que no iba a ser una maravilla, una obra de arte, pero no sé, esperaba quizás un reparto más equitativo de importancia, quiero decir, esta peli podría haber sido un trío: Channing Tatum (quien parece estar de moda), Alex Pettyfer y la actriz que interpreta a la hermana de este, Cody Horn; bueno, dejo también que entre en el selecto grupo Matthew McConaughey porque es el jefe del local. Bien, el caso es que, como digo, estos son los protagonistas absolutos de la película, el resto están para adornar y para mero lucimiento de Tatum; entonces me asalta una duda, ¿por qué cuentas también con alguien como Matt Bomer, que ahora está teniendo tirón debido a los rumores sobre su ‘posible’ participación en la adaptación cinematográfica de 50 sombras de Grey, si lo vas a tener rellenando y con dos frases? Vale, puede que el hecho de que sienta predilección por este hombre haya influido un poco en mi modo de ver la película, pero es que lo mismo podría decir, por ejemplo, de Adam Rodríguez (conocido por su papel en CSI: Miami).

Pero hablando de actores, se lleva la palma Cody Horn; no conocía a esta actriz y la verdad es que después de verla aquí creo que no quiero ver nada más de lo que haga… por dios, rodeada de esos cuerpos y siempre con una cara de enfado (incluso cuando se supone que debe sonreír y pasárselo bien parece demasiado forzado).

Después, tampoco me parece demasiado acertado el giro que sufre el personaje de Pettyfer, no por lo que hace o le sucede, sino por el tiempo: en cuestión de meses (creo que eran tres) el chaval está irreconocible. Hombre, no sé cuánto engancha este estilo de vida, pero quizás es un poco precipitado pasar de un extremo al otro, ¿no?

Pese a esto, he de decir que me pareció bien que hubiese algo de ‘chicha’ tras todos los bailes y meneos corporales que se pegan los chicos, y es que tenemos a un stripper, Tatum, que se cuestiona su trabajo en beneficio de su sueño, algo que se resuelve al final pero que estaba claro que iba a suceder (ya se sabe, tiran más dos tetas que dos carretas).

En general sirve para pasar un rato entretenido, no sacas una lección de vida, en mi opinión, pero tampoco es un bodrio. Eso sí, si no eres muy fan de Tatum puede que te aburras un pelín.

Destaco la coreografía primera (si no recuerdo mal), en la que empiezan con unos paraguas; de todas las que hay es con la que me quedo :)  ¿Y vosotros/as, con cuál os quedáis?

Y por el momento nada más, os dejo que me voy a calcetar un ratito  ^^

¡Un bico!