lunes, 19 de marzo de 2018

La Bella y la Bestia


¡Hola!
¿Qué tal todo? Hoy me paso por aquí para contaros mi humilde opinión sobre una de las últimas películas que tuve ocasión de ver; se trata de La Bella y la Bestia, en su versión de carne y hueso, estrenada hace, relativamente, poco.




Adaptación en imagen real del clásico de Disney "La bella y la bestia", que cuenta la historia de Bella, una joven brillante y enérgica, que sueña con aventuras y un mundo que se extiende más allá de los confines de su pueblo en Francia. Independiente y reservada, Bella no quiere saber nada con el arrogante y engreído Gastón, quien la persigue sin descanso. Todo cambia un día cuando su padre Maurice es encarcelado en el castillo de una horrible Bestia, y Bella se ofrece a intercambiarse con su padre y queda recluida en el castillo. Rápidamente se hace amiga del antiguo personal del lugar, que fue transformado en objetos del hogar tras una maldición lanzada por una hechicera. 



Bueno, todos conocemos la historia que Disney nos contó y, seamos sinceros, nos gusta; es una película de animación para el público infantil que, igual tiene tópicos a día de hoy que pierden fuerza, sigue teniendo su legión de fans. Hasta aquí todo correcto, ¿verdad? Bien, pues, como opinión general, no era necesaria esta nueva película.

¿En qué momento Hollywood se queda sin ideas y siente la necesidad de recurrir a clásicos para, en mi opinión, destrozarlos? Pues en estos años… De verdad, qué despropósito de película; los personajes son unos sosos, a todos les dieron una vuelta de tuerca totalmente innecesaria, son sombras pobres de su versión animada, son planos, son personajes que simplemente pasean por la pantalla. Pero es que quien se lleva la palma es él, la bestia… Demasiado humana físicamente, no impone nada, no da miedo, ni respeto, te dan ganas de lanzarle un palo y que corra tras él; Bella, solo sabe poner caras estreñidas; Gastón… da risa, pero de la mala; y ya no hablemos del mobiliario del castillo (y menos de cuando al final se convierten de nuevo en humanos, que ya es el mayor de los despropósitos).

La historia, ya conocida, sufre también una vuelta de tuerca, las muertes de las madres de ambos protagonistas, que son iguales y eso consigue que se enamoren más (ya parecen Batman y Superman), la historia del padre de Bella con la hechicera, personaje que se convierte en el deus ex machina de esta película. Además, no se profundiza en nada, es todo demasiado rápido, pasa todo a correr, y eso que la película dura 2 horas y poco; las canciones, para aburrir. Todos sabemos que las cintas de Disney pueden pasar por musicales, vale, pero desde el momento en el que en este remake aparecen dos o tres canciones nuevas… ¿Qué necesidad?

Para mí, la mejor parte es cuando acaba; se me hizo larguísima, no me gustó nada de nada; solo salvaría el vestuario y la ambientación, eso sí; pero por salvar algo.

¿Qué nos queda ahora? Temer por el remake que están preparando de Aladdin y, si no estoy confundida, de Mulán también… Miedo me da.

¿Qué os pareció esta nueva adaptación? ¿Era necesaria?


Hasta la próxima entrada  J

1 comentario:

  1. ¡Hola! No soy mucho de ver películas pero a esta le tengo muchas muchas ganas. Un besote :)

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