¡Hola!
¿Qué
tal todo? Espero que bien… Hoy os traigo mi humilde opinión sobre una de las
últimas novelas que leí, se trata de una historia que llegó a mis manos gracias
al Círculo de Lectores: La heladería de Vivien y sus recetas para corazones solitarios, de Abby Clements.
Hace
más de medio siglo que la heladería de Vivien es parte sustancial del paisaje
del paseo marítimo de Brighton. Pero a pesar de su encanto añejo su clientela
ha ido menguando hasta niveles insostenibles. Tras la muerte de Vivien, el
destino ha dictado sentencia: serán sus nietas Imogen y Anna las encargadas de
devolverle al negocio su antiguo esplendor. Imogen ha hecho realidad sus sueños
de adolescente: tras abandonar la lluviosa Gran Bretaña, se ha instalado en
Tailandia, donde pasa sus días entre amigos, playas y la fauna marina tropical
que tanto le apasiona fotografiar. Su objetivo no es otro que, algún día,
lograr reunir todas esas instantáneas en una exposición que estalle en colores
sobre las blancas paredes de una galería. Además, comparte con Luca pasión,
noches e ilusión. La vida también le sonríe a su hermana Anna en Inglaterra,
feliz con el ascenso en la empresa donde trabaja e ilusionada con mudarse junto
a su novio Jon a su nuevo piso. Imogen y Anna parecen encaminarse feliz y
tenazmente hacia el futuro que ambas siempre habían deseado, pero la inesperada
muerte de la abuela Vivien trastocará todos sus planes y pondrá sus vidas y
proyectos en cuarentena. Porque, en la lectura del testamento, descubrirán que
ambas son las flamantes propietarias de la heladería familiar.
La
verdad es que esta novela lleva un tiempo en mi estantería y no fue hasta hace
bien poquito que me puse a leerla; lo hice debido a que necesitaba un cambio de
género en mis lecturas, antes de volver al mundo de la ciencia ficción.
Pues
bien, la verdad es que la historia que cuenta es justo lo que promete, dos
hermanas que tienen que hacer frente al negocio en declive que les deja su
abuela y poco a poco vamos conociendo la vida de cada una de ellas y cómo esta
nueva aventura les afecta, que no es poco. Como podéis imaginar, no es ningún
spoiler, la vida les cambia total y radicalmente y desde antes de medio libro
puedes imaginar cómo termina la historia, no hay grandes sorpresas la verdad.
Los
personajes están muy bien definidos, tanto las dos protagonistas como el
plantel de secundarios que se encuentran por el camino, con más o menos peso
sobre la historia. Y, pese a algún momento algo más pesado, la historia se deja
leer muy bien, toda ella adornada con toques de helados, que, seamos sinceras,
nunca sobran.
Al
final del libro, la autora incluyó cinco recetas de helados para poder hacer,
lo cual es todo un detalle después de leer y leer sobre ellos. La verdad es que
poco más tengo que decir de esta novela, está bien, fue agradable de leer y me
parece perfecta para pasar unas horas entretenida, sobre todo pensando, como
fue mi caso, en dar un descanso a otro género literario. Además, su portada me
pareció genial.
¿Conocíais
esta novela? ¿Qué opinión os merece este mundo de helados?
Hasta
la próxima entrada J
No hay comentarios:
Publicar un comentario