Hola!!
Qué tal os va? Espero que todo de maravilla, ahora
que el tiempo empieza a acompañar…
Como os dije el otro día, empezamos una nueva etapa,
con ganas, ilusión y opiniones, así que allá vamos!
El oscuro y exquisito placer de
la posesión... «Gideon Cross apareció en mi vida como un rayo en la oscuridad…
Era guapo y brillante, imprevisible y sensual. Me atraía como nadie ni nada lo
había hecho nunca». Sexy, adictiva y seductora, la tercera entrega de la serie
Crossfire consolida su gran éxito internacional y se devora con avidez.
Pues bien, hoy os traigo el tercer libro de la saga
de Crossfire, de Sylvia Day, Atada a ti; de las dos primeras partes (No te escondo nada y Reflejada en ti) ya os hablara
anteriormente.
Después del final de Reflejada en ti quedamos
boquiabiertos y con ganas de mucho más, cosa que la autora nos da con creces,
ya que decidió que en lugar de tres libros vamos a tener cinco… Hecho que, a mi
parecer, se nota en esta tercera entrega.
En este libro seguimos viendo cómo, poco a poco,
Gideon y Eva se van conociendo más y cómo van superando los obstáculos que se
presentan ante su relación, relación que podríamos decir, no es al uso… Pues
bien, pesa muchísimo el evento que tuvo lugar al final del libro anterior, es
como una constante durante esta parte, así que eso, añadido a las inseguridades
de ella, al carácter controlador de él y a esos personajes secundarios que
aparecen, nos da como resultado un cóctel explosivo.
Sylvia Day sigue con el mismo estilo que anteriormente,
detallando cómo se siente nuestra protagonista y cómo con un simple pensamiento
es capaz de hacer que Gideon deje todo para ir corriendo a su lado; en ese
sentido, me pareció bastante egoísta Eva, parece que sólo ella tiene problemas
y en varias ocasiones se nos convierte en un mar de lágrimas que sólo Gideon
sabe calmar… Como vemos, siguen en sus líneas, ella sufriendo por todo y él
encargándose de todo.
Personalmente no fue el que más me gustó porque se
centra, a mi parecer, demasiado en la relación entre Gideon y Eva, dejando
menos aprovechados conflictos secundarios que podrían dar mucho juego… Pese a
ello, me parece interesante ver cómo esa relación va transformándose poco a
poco, pues tenemos más cariño y ternura que al principio, sin perder esa pasión
y fogosidad que los caracteriza. Espero que en los dos siguientes libros Sylvia
Day trate esos otros conflictos, porque si no conocer sólo la relación de Cross
y Trammell va a cansar…
Aún así, siempre está bien volver a viejos conocidos,
no?
Un saludo y hasta la próxima entrada ;)
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